La medida cautelar fue presentada en la Corte de Apelaciones de Rancagua y tiene por objeto proteger los derechos fundamentales de párvulos y estudiantes autistas de la región frente a la circular N°841 del organismo estatal, la que presentaría posibles amenazas en torno a la contención física y expulsiones de alumnos con esta condición.
La mañana de este lunes 27 de mayo integrantes de la agrupación Autismo Rancagua y de la Fundación Inclusión Azul llegaron hasta la Corte de Apelaciones de Rancagua, para interponer un recurso de protección a favor de los estudiantes autistas de la región, frente a lo que estiman sería una amenaza a sus derechos derivada de una circular emanada desde la Superintendencia de Educación el 17 de mayo.
La circular, que lleva el nombre de Ordinario N°841 de la Superintendencia de Educación, está dirigida a sostenedores y directores de todos los establecimientos educacionales del país y tendría el propósito de entregar orientaciones y señalar normativa educacional referida a la inclusión, atención integral y protección de los derechos de párvulos y estudiantes con trastorno del espectro autista, sin embargo, en algunos de los puntos abordados por el documento oficial, las agrupaciones de autismo han visualizado falencias que podrían derivar en vulneraciones de derecho para alumnos y alumnas que presentan este tipo de necesidades educativas especiales y que verían incluso afectada su integridad física y psíquica o interrumpida su trayectoria educativa.
Los puntos que motivarían este recurso de protección serían el referente a contención física dentro del protocolo de repuestas y atención de desregulación emocional y conductual, en el que se señala esta podría ser realizada a estudiantes autistas, sin contar con autorización previa de los padres o apoderados, y el que aborda la aplicación de medidas disciplinarias que establece que los alumnos podrán ser expulsados o cancelada su matrícula cuando la conducta que se sanciona no se asocie directa o indirectamente a su condición.
Al respecto la Presidenta de la Agrupación Autismo Rancagua, Elizabeth Escobedo, señaló que existiría una contradicción entre el contenido de estos puntos de la circular y las leyes de protección a la infancia y la ley de Autismo por lo que habrían decidido como comunidad tomar este camino legal para proteger los derechos fundamentales de los niños, niñas, jóvenes y adultos autistas de la región, sentando un precedente a nivel nacional. “ En esta circular la Superintendencia nos habla de inclusión, pero al mismo tiempo deja expuestos a los autistas a recibir una contención física en manos de alguien no capacitado, o a ser expulsado por presentar una desregulación que sea atribuida no a su condición. En ninguna parte del mundo se ha podido determinar qué conductas corresponden al autismo y cuáles no, ¿serían nuestros establecimientos educacionales los primeros en el mundo en lograr tener las capacidades para hacer esta separación? Ante esto se hace totalmente necesario presentar esta acción legal, que tiene como fin ir en la senda que marcó la ley de Autismo la que hasta hoy solamente hemos visto en el papel”, cerró la presidenta de Autismo Rancagua, quienes junto a otras organizaciones de autismo a nivel nacional están solicitando sea anulado el mentado ordinario N°841.